Hoy quiero contarte la historia de las famosas moscovitas de Oviedo y así rendir un pequeño homenaje al padre de estas deliciosas pastas, Marciano González Mansilla, en el 25 aniversario de su fallecimiento.
Debido a la escasez de aquellos tiempos (1948) Marciano, maestro confitero en un conocido establecimiento de Oviedo, miraba mucho por los ingredientes con los que trabajaba. Una tarde, tenía un sobrante de pasta de almendra, que había utilizado para otra elaboración y un cazo con restos de chocolate fundido para bombones. Para aprovecharlo, añadió un par de ingredientes a la almendra, lo horneó en pequeños montoncitos y lo bañó con el chocolate, dando lugar a estas riquísimas pastas.
Ese día los empleados conversaban sobre Rusia y en esa conversación salieron los moscovitas, a Marciano le gustó ese nombre y así las bautizó.
Esto es un resumen de la historia que me contó Juan Carlos González (hijo de Marciano), si quieres conocerla entera, al final de la entrada te la dejo completa en un reportaje publicado por el periódico local La Nueva España.
Ingredientes para unas 100 moscovitas
200 g de azúcar glas
200 g de nata para montar
200 g de almendra cruda en granillo
50 g de harina (de almendra si no puedes tomar gluten)
Pizca de vainilla
300 g de cobertura de chocolate con leche
Preparación de las moscovitas
Modo tradicional
1.Calienta el horno a 180°, calor arriba y abajo.
2.Pon a calentar un cazo con la nata y el azúcar a potencia media y remueve para mezclarlo.
3.Una vez disuelto el azúcar, añade la pizca de vainilla y mézclala con el resto.
4.Cuando empiece a hervir añade la almendra y la harina remueve y deja cocer un minuto. Tiene que quedar una masa un poco gorda.
5.Cubre una bandeja de horno con papel vegetal y con una cucharilla pequeña, vete colocando pequeños montoncitos separados, pues en el horno se van a extender.
6.Hornea durante 8/10 minutos, hasta que empiecen a dorar.
7.Dejar enfriar sobre una rejilla y unta con un pincel o espátula la cara más lisa (la que estaba tocando el papel) con el chocolate fundido. Deja enfriar con el chocolate hacia arriba.
Thermomix
1.Calienta el horno a 180º, calor arriba y abajo.
2.Echa el azúcar en el vaso y tritura 30 segundos a velocidad progresiva 5/10.
3.Añade la nata y programa 7 minutos, 100º, velocidad 1. Incorpora la pizca de vainilla y mezcla 10 segundos a velocidad 3.
4.Agrega la almendra y la harina y programa 2 minutos, 100º, velocidad 2.
5.Cubre una bandeja de horno con papel vegetal y con una cucharilla pequeña, vete colocando pequeños montoncitos separados, pues en el horno se van a extender.
6.Hornea durante 8/10 minutos, hasta que empiecen a dorar.
7.Dejar enfriar sobre una rejilla y unta la cara más lisa (la que estaba tocando el papel) con el chocolate fundido. Deja enfriar con el chocolate hacia arriba.
Atemperado del chocolate
El chocolate contiene manteca de cacao que al enfriarse se cristaliza, si lo dejas cristalizar de cualquier forma, se quedará sin brillo y con manchas blanquecinas.
Para que cristalice en partículas de tamaño similar, hay que atemperarlo.
Para ello tienes que fundirlo a 45º, enfriarlo a 27º, removiendo constantemente, y volver a subirle la temperatura a 30º.
Puedes hacerlo al baño María. Calienta un cazo con agua a potencia media, e introduce en él un bol con el chocolate troceado, (que no entre nada de agua). Fúndelo hasta que la temperatura llegue a 45º. Mételo en otro bol con agua fría hasta bajarle la temperatura a 27/28º, removiendo continuamente. Vuelve a meterlo en el de agua caliente hasta subirle la temperatura a 30º (siempre removiendo).
También lo puedes hacer en el microondas, derrite 200 g del chocolate, removiendo cada poco, hasta alcanzar los 45º, añade el resto del chocolate y remueve hasta que baje a 27/28º. Dale una vuelta en el micro y comprueba la temperatura hasta llegar a 30º
Con la thermomix, pon 200 g del chocolate en el vaso y programa 5 minutos, 50º, velocidad 1. Añade el resto del chocolate y programa 2 minutos sin temperatura a velocidad 2, comprueba, con un termómetro de cocina, que haya bajado la temperatura a 27/28º, si no es así programa unos minutos más hasta conseguirlo. Una vez alcanzada esa temperatura, programa 2 minutos, 30º, velocidad 2.
Una vez que el chocolate esté a 30º, estará listo para usar.
Observaciones
-Cuando te digo pizca de vainilla, es porque yo utilizo una vainilla cristalizada y con muy poco ya da mucho sabor. Si utilizas vaina con media será suficiente.
-También puedes usar una manga pastelera para colocar los montoncitos en la bandeja. Procura que todos sean más o menos iguales y acuérdate de colocarlos separados para que no se peguen al crecer.
-Aunque ahora las moscovitas se presentan bañadas con chocolate por la parte de atrás, originalmente Marciano cogía la pasta con los dedos e introducía la mitad en el cazo con el chocolate fundido.
Una receta estupenda, fácil y salen riquísimas. Gracias Susana
Gracias a ti por contarnoslo😘😘